Si quieres salir de la posición toma pedidos y dejar de vender al libre albedrío, esta información es para ti:
Debemos ser muy conscientes, y tener en cuenta que las ventas a través de los canales digitales (WhatsApp, Videoconferencia y DM) son una consecuencia y no una estrategia.
Son la consecuencia de la transformación digital y de la pandemia, que llevó a las empresas a improvisar y adaptarse rápidamente para vender por medio de los nuevos canales.

Las ventas presenciales son las que más robustas están desde el conocimiento, luego siguen las telefónicas, y ahora en esta última década aparecen las digitales, donde aún está todo por aprender.
Las ventas digitales pertenecen a un mundo de improvisaciones que afectan el resultado, pero no al punto de no vender, sino todo lo contrario: a las empresas les va muy bien vendiendo empíricamente y al libre albedrío.
El punto en cuestión, y el motivo por el cual se necesita hacer un cambio en la forma de vender, se enfoca en lo que están dejando de vender, y lo más importante en cómo se daña la imagen de la marca sin saberlo.
Debemos ser muy conscientes, y tener en cuenta que las ventas a través de los canales digitales (WhatsApp, Videoconferencia y DM) son una consecuencia y no una estrategia.
¿Y cómo se daña la imagen de una marca?
Cuando se demoran en responder los mensajes, cuando tu equipo comercial no hace seguimiento a los prospectos y cotizaciones (como si no les interesara venderles), cuando los chats tiene problemas de redacción y ortografía, cuando no indagan necesidades para conocer al futuro cliente, o simplemente cuando no les informan los horarios de atención por los diferentes canales de ventas, entre otros factores que en otro momento profundizaremos.